Puede que no lo recuerdes pero los pensamientos y las palabras son una fuente de poder incalculable, sí muchas veces cuando pensamos de manera negativa o positiva activamos un mecanismo energético, lo mismo pasa con las palabras, pues ambos trazan el camino que inicia aquello que queremos o no queremos vivir y es que el universo nos ha dado esa fuerza para poder crear o destruir, es por ello que debemos pensar y hablar en positivo para poder crear esa línea de atracción de buenas energías, buenas vivencias o experiencias, hay que ser consecuente con lo que pensamos o decimos, asumir que las acciones producidas por los pensamientos o palabras tienen un origen y un final, pueden ayudarnos a superar obstáculos o estancarnos en una espiral de apatía y sentimientos dañinos a nuestro crecimiento personal y espiritual.
Aveces las malas acciones o experiencias nos impulsan a tomar el camino equivocado, pensando desde el rencor, el miedo, el dolor y la rabia, esos pensamientos nos conducen a maldecir todo cuanto tenemos por delante, infectandonos con una energía muy densa o de baja vibración. En esos casos podemos llegar hacerle daño a los demás y claro todo se llega a poner tan negativo que en algunas ocasiones es difícil salir de es situación, pero no todo es negatividad, cuando pensamos de manera positiva, somos optimistas y mantenemos una buena actitud, comenzamos a resonar y a vibrar con una energía positiva, atraemos buenas situaciones y nos rodeamos de gente buena!
Cuida lo que piensas y dices pues ello puede hacerte llegar tan lejos como quieras o hundirte y lentamente dejándote con una sensación de perdida y descontrol.
Wilbert Martínez
formador y facilitador de crecimiento personal.